El primer belén social
En la Navidad de 1953 presenta la recién fundada asociación el primer Belén Social en las Escuelas de San Francisco. Llamó poderosamente la atención del público este Belén de la Asociación de Belenistas en la Navidad pamplonesa.
Desde los inicios se han ido programando charlas y cursos de formación belenista, concursos varios: de belenes, literarios, villancicos, de escaparates, etc. Todo ello con la mirada puesta en el artículo primero de los Estatutos fundacionales que decían: "...tiene por objeto fomentar por todos los procedimientos a su alcance la tradicional costumbre de la construcción de belenes o nacimientos, ambientación de la Navidad...".
El 21 de octubre de 1956 se inaugura en el tercer piso del número 33 de la calle Estafeta la sede social, que durante mucho años ha sido el centro de toda actividad belenista y lugar de encuentro de los socios; ese mismo año se edita el primer número de la revista Belén.
Creación de las asociaciones de belenistas
En el año 1963 la Asociación de Belenistas de Pamplona es cofundadora de la Federación Española de Belenistas. Esta entidad encarga a los Belenistas de Pamplona la organización en los años 1964, 1972, 1979, 1988 y 2000 de los Congresos Nacionales Belenistas.
En 1997 fundó, junto a otras asociaciones navarras la Federación de Belenistas de Navarra, Fe.Be.Na., para fomentar el asociacionismo belenista en la Comunidad Foral.
La mayor dificultad con que ha tropezado la Asociación de Belenistas de Pamplona ha sido la de no disponer de un local estable para sala de exposiciones, que han debido ser itinerantes por diversos locales y salas de Pamplona. Esta carencia finalizó en el año 1982, cuando el Arzobispado de Pamplona, gracias a la buena disposición de la Parroquia de Cristo Rey y su equipo sacerdotal, cedió "a precario" a los Belenistas el uso como taller y local de exposiciones de la Cripta de la Iglesia de Cristo Rey de Pamplona. Un local de más de 500 m2 con 14 dioramas de tres metros por tres metros donde poder realizar nuestras exposiciones. Esa navidad se expusieron los primeros belenes en este local.
En esta sala, que los belenistas llamamos cariñosamente "Belén", visitan la exposición unas 60 mil personas cada Navidad. La posibilidad de disponer de un local con su taller durante todo el año posibilitó que las actividades de la asociación se multiplicaran. Aumentó el número de socios y para 1985 éramos 202. Se empezó a editar el boletín AUZOLAN BELENISTA con información para todos los socios y que difundimos a todas las asociaciones belenistas que conocemos.